Carmen Aub Instagram – Leí este artículo en @theschooloflifelondon y me gustó! Les comparto una parte: Aunque el Pecado Original se desarrolló en términos teológicos, su implicación es realmente psicológica: como individuos tenemos que aceptar desde el principio que siempre habrá bastante que esté íntimamente muy mal con nosotros. Esto no debería verse como una admisión impactante e incómoda, sino como una verdad necesaria que se aplica a todos y debe ser aceptada con humildad. No sería extraño admitir las propias imperfecciones sustanciales: sería (por el contrario) ridículo y sospechoso pretender que podríamos no tener ninguna…… Nacimos inmensamente vulnerables; fuimos criados de manera imprevista; nuestros cerebros no están bien adaptados para el autoconocimiento; nuestros instintos evolucionaron para una vida de caza y recolección en lugar de ayudarnos con las demandas de la modernidad; y la cultura que nos rodea es frecuentemente alarmista, obsesionada con el estatus y puede ser muy cruel exigiendo éxito y asegurando que casi siempre nos sintamos como fracasados…. El punto de todo este contexto es recalcar la idea de que reconocer los propios defectos no es una solicitud para admitir algo muy extraño. Lo extraño (de hecho) sería pensar que uno está sin defectos mayores. Claro que también tenemos cualidades encantadoras. Pero eso significa que inevitablemente vamos a ser muy difíciles para otra persona con la que convivir. … El punto de ser claros y honestos sobre nuestras fallas es reconocer que contribuiremos sustancialmente a las dificultades que seguramente encontraremos en una relación. Nos anima a resistir la tesis, de otro modo muy tentadora, de que estamos con un idiota o un bruto. Nos ayudará a sonreír y pedir disculpas cuando la otra persona esté en la cocina gritándonos, como lo hará, después de otra muestra de nuestra tontería. Con un fuerte sentido de nuestras fallas en mente, seremos más conscientes de la generosidad que muestra nuestra pareja en su disposición para aceptarnos.