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![Irene Montero Instagram - Fuerteventura nos ha acogido estos dĆas con sus playas y paisajes increĆbles. Gracias š„°
La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„š](https://www.gethucinema.com/wp-content/uploads/2024/08/Irene-Montero-0-25DBIO4392-300x375.jpg)
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La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„š](https://www.gethucinema.com/wp-content/uploads/2024/08/Irene-Montero-1-tOuYTo3307-300x375.jpg)
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La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„š](https://www.gethucinema.com/wp-content/uploads/2024/08/Irene-Montero-0-25DBIO4392.jpg)
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Caption : Fuerteventura nos ha acogido estos dĆas con sus playas y paisajes increĆbles. Gracias š„° La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua. Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n. Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„šLikes : 24798
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La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„š](https://www.gethucinema.com/wp-content/uploads/2024/08/Irene-Montero-6-0HPqp63764.jpg)
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Caption : Fuerteventura nos ha acogido estos dĆas con sus playas y paisajes increĆbles. Gracias š„° La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua. Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n. Pues hemos estado juntas, felices, disfrutando de nuestra amistad, aprendiendo cosas nuevas y haciendo cosas bonitas. Ahora tambiĆ©n juntas llegamos a septiembre para coger la ola completa, con todo lo que venga ā¤ļøāš„šLikes : 24798
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La isla del viento, isla de destierro para Durruti y Unamuno, y tambiĆ©n usada como isla prisiĆ³n durante el franquismo para presos polĆticos y personas trans y LGTBI perseguidas y condenadas a trabajos forzados en el campo de concentraciĆ³n de TefĆa. āNo habĆa muros, no les hacĆa falta porque es un desierto y cualquiera se escapaba de allĆā decĆa Antoni Ruiz, superviviente. Les forzaban a picar piedra y comĆan pan y agua.
Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Unamuno decĆa que era una isla āhoy pobre, muy pobre, que puede enriquecerse si logra alumbrar agua; pero rica, riquĆsima en la nobleza de sus habitantes, los majoreros -que asĆ se llaman- y en la maravilla de su climaā
Buenaventura Durruti pasĆ³ en Fuerteventura cuatro meses y medio de destierro en 1933 junto a Domingo Ascaso y el minero anarquista Manuel Prieto. Los majoreros que le conocieron, como RamĆ³n CastaƱeyra, que tambiĆ©n habĆa sido anfitriĆ³n de Unamuno, decĆan que era un hombre que ayudaba a quien lo necesitara. Daba clases a los niƱos y personas mayores que quisieran aprender y se reunĆa con marineros y obreros para hablarles del sindicato y la importancia de organizarse. A su hermana Rosa le dijo por carta que habĆa conocido a personas que le invitaban a su casa y le prestaban libros y que hasta que les conocieron, la gente de la isla estaba asustada porque les habĆan dicho que se comĆan niƱos crudos. La prensa, por ejemplo El PaĆs de entonces, decĆa de ellos que eran āhombresfiera, pistoleros [ā¦] una legiĆ³n de forajidos, de indeseables, que EspaƱa arroja de su seno por ser imposible su convivencia con el pueblo serio y honradoā. TambiĆ©n le decĆa que cuando volviese a la penĆnsula pedirĆa explicaciones a los socialistas que habĆan votado a favor de su deportaciĆ³n.
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Caption : Orgullo 2024 āØš„š³ļøāšš³ļøāā§ļøš La fiesta de quienes no estaban invitadas a la fiesta. La lucha cotidiana para que todo el mundo pueda ser quien es, para que podamos ser felices. Una sociedad bonita y justa es una sociedad orgullosa. Por todo lo que nos queda por hacer. Porque no hemos ido demasiado lejos. Porque esto no ha hecho mĆ”s que empezar. Porque no hay orgullo en el genocidio, la paz es nuestro Orgullo. Con memoria, con Orgullo, con furia Trans. Para todas, todes y todos, TODO šŖš¼šLikes : 17155
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Caption : Feliz madre de tres šāØ Feliz vida y con mĆ”s derechos a todas las madresLikes : 15993
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Caption : Que viva el Orgullo LGTBI y que viva la Furia Trans! š³ļøāšš³ļøāā§ļøš No hemos ido demasiado lejos, esto no ha hecho mĆ”s que empezar. A luchar y celebrar con orgullo y visibilidad š„ La paz es nuestro orgullo, porque no hay orgullo en el genocidio ni en la escalada bĆ©lica. Porque la guerra nunca viene sola, viene con retrocesos en los derechos feministas y LGTBILikes : 15022
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Caption : Candelaria š«¶š¼šLikes : 14386
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Caption : Ā”La autora de esta foto (y de la ediciĆ³n) es Aitana! šøš„°Likes : 14108
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Caption : Y asĆ llega a su fin el primer fin de semana de campaƱa š„° El domingo 9 de junio hay elecciones europeasā¦ Ā”vota! Queremos la belleza, no las sobras šµš¶Likes : 13095
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Caption : Frente a su reacciĆ³n nuestra lucha y la de todas las mujeresāš #8M2024Likes : 12693
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